La solemnidad viaja en barco (y naufraga)

Han Yeo-reum en una escena de El arco
Chiste tonto y fácil: la película naufraga. Otro: hace agua por todos lados. El arco (Hwal, Kim Ki-duk, 2005) cuenta la historia de un viejo que vive en un barco con una chica a la que encontró diez año atrás. Están solos en medio del mar. No se hablan, aunque están comunicados. Como un preso esteriotipado, el viejo marca los días en un calendario. No espera su libertad sino la día en que la chica cumpla 17 años para convertirla en su esposa. En los hechos ella, que no conoce el mundo exterior, está secuestrada. Pero no muestra disgusto.

Afiche de El arco
EL ARCO (2005)
Título original: Hwal. Fecha de estreno: en Corea del Sur, 12 de mayo; en Argentina, 25 de enero de 2007. País: Corea del Sur/Japón. Duración: 90 minutos. Dirección: Kim Ki-duk. Producción: Kang Yong-gyu, Kim Ki-duk y Michiko Suzuki. Guión: Kim Ki-duk. Fotografía: Jang Seong-back. Montaje: Kim Ki-duk. Música: Kan Eunil. Elenco: Jeon Sung-hwan, Han Yeo-reum, Seo- Ji-seok, Jeon Gook-hwan.

Todo esto queda claro en los primeros minutos, aunque la película lo remarca durante algunos más. Pero esa armonía rutinaria se despedaza, ese microuniverso pierde su equilibrio con la llegada de un nuevo contingente de pescadores deportivos. Entre ellos hay un adolescente (re)cargado de referencias al mundo exterior: un walkman, un arito, una remera con inscripciones en inglés. Como era previsible, se desata un conflicto.

La mirada es más bien contemplativa y no pretende juzgar. Muchos menos aleccionar. Pero el problema no es la falta de un juicio crítico hacia algunas costumbres repudiables o hacia la supuesta misoginia de su director. El problema no es moral sino puramente artístico.

La elogiada corrección formal no es más que solemnidad, a veces demasiado cercana al tedio. Mientras que un largo plano secuencia de Michael Haneke es, además de una belleza, una invitación a la reflexión, aquí no hay más que pura estética. En eso se parece a Agua (Water, Deepa Mehta, 2005), otra película que de tanta pulcritud termina siendo pretenciosa.

La aparente sutileza en la que se movía el film se demuestra falsa en un par de planos detalle. Que la imagen prevalezca sobre la palabra no es garantía contra la redundancia. En este sentido El arco no logra escapar del todo a cierto literalismo al que el pintor Kim Ki-duk se ciñó en la sobrevaloradísima Primavera, verano, otoño, invierno... y otra vez primavera (Bom yeoreum gaeul gyeoul geurigo bom, 2003). Queda claro en la escena en que ella pierde la virginidad, orgasmo incluido, luego de que un arrebato de rebeldía juvenil ceda de manera dócil e inverosímil ante la tradición. Es de lo más cursi visto en años y genera vergüenza ajena. Lo mismo ocurre con la dualidad sobre el arco que da título a la película: sirve tanto para lanzar violentas flechas como para tocar apacible música (que, dicho sea de paso, en el film siempre suena acompañado de un piano).

Lo que podría haber sido un mediometraje interesante (no más que eso) termina siendo una película de una hora y media que, sobre el final, exacerba una serie de disparates simbólicos que harían las delicias de psicólogos de autoayuda. Desde 1996 Kim Ki-duk viene filmando a un promedio de una película y pico por año, la mayoría de las cuales sólo llegaron a Buenos Aires a través de festivales. Sería imprudente, entonces, trazar alguna generalidad luego de haber visto apenas un puñado. Pero queda claro que si Primavera... y El Arco fueran aforismos ni el mismísimo Narosky se animaría a publicarlos. ■

12 comentarios:

  1. Como verás, Spectatrice, volví con todo: pendenciero y buscarroña... ;)

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  2. ¡Jajajaja! ¡Y yo que estaba a punto de rasgarme las vestiduras, Andrés! Pero tu comment "premonitor" me hizo reír. La verdad... me desarmó. :P

    Dos cositas, ahora escritas sin indignación.
    La primera. Soy incondicional de Kim Ki-duk. El arco me gustó mucho (las razones se encuentran acá; la pondría en un tercer lugar después de Hierro 3 en un primer lugar y Primavera, verano, otoño... en un segundo lugar. En este ranking "kimkidukiano" El tiempo ocuparía un cuarto lugar.
    La segunda. Me alegra que estés de vuelta. Extrañaba las actualizaciones -a veces pendencieras y buscarroñas- de Cinematófilos. ;-)

    Un saludo.
    PD. Durante tus vacaciones, vi Bucarest 12:08. Me encantó. :)

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  3. No me queda claro si la peli te gustó.....
    REF

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  4. Spectatrice. Tu incondicionalidad me deja poco espacio para la crítica. Vi Hierro 3: al lado de Primavera... y El arco parece El ciudadano, pero de todas maneras no es nada extraordinario. Evidentemente no vi la maravillosa película que tanto elogió la crítica. Ante este panorama, debo admitir que no me animo a alquilar El tiempo.

    REF. Eso de andar con medias tintas no es lo mío.

    Saludos

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  5. No alquiles El tiempo, Andrés. No te va a gustar y vas a terminar escribiendo un post sobre posibles similitudes con alguna película de Ledo protagonizada por Francella. Y ahí sí me enojo. :P

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  6. ¡Jajajajajaja! Nunca un comentario en el blog me hizo reír tanto. :D

    Con el cine discutimos bastante, pero nadie puede negar que nos divertimos mucho...

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  7. Hola, me ha gustado leer tu opinión. Me parece que cuando el arte retrata lo solemne en ese tono fracasa. Saludos!

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  8. Bienvenido de nuevo Andrés, a mi debo reconocerte que Kim Ki Duk me fascina como director, asi que poco más puedo decirte XXDD. Aunque mi película favorita de él es "Samaritan Girl", durísima, muy seca y directa. Pero en general toda su obra me gusta, he tenido la suerte de ver casi toda, solo una no me convenció, no me acuerdo bien el nombre en español, era de un soldado, esa no me gustó mucho.
    Un abrazo desde el Reducto

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  9. Budokán. Gracias. Estoy de acuerdo: una cosa es ser serio y otra, muy distinta, ser solemne.

    Ivan. No vi nada de Kim Ki-duk anterior a Primavera... En Argentina esas películas sólo llegaron a través de festivales y no tuvieron estreno comercial. Tengo entendido que cambió bastante el tono a partir de Primavera... y el éxito en los festivales internacionales, y que desde entonces muchos de sus seguidores comenzaron a tomar distancia. En lo que vi, creo que el tipo tiene buenas ideas, pero las desaprovecha en el desarrollo y apela a demasiadas cursilerias.

    Un abrazo

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  10. Andres, naufragas, haces agua por todos lados,=-) se me ocurren obviedades como, por ejemplo que el arco no es una pelicula para "cualquiera", ja, pero a pesar de este pensamiento meloso mio eso creo en verdad de esta pelicula y de este director de cine, me sorprende cada pelicula y sobre todo las peliculas en las que casi no se escuchan palabras como en el arco o en hierro 3, me fascina ese silencio, me deja sin respiracion. estas peliculas son para espiritus mas elasticos que el tuyo, mas etereos, menos estructurados, menos criticos tontamente, bueno, es mi opinion un tanto tonta tal vez, que se yo.
    saludos

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  11. sos un pelotudo andrés, anda a mirar los superagentes o la nueva peli de la momia que te va a gustar ....

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  12. Aquí no se moderan los comentarios, pero el que dejó un tal Diego, justo arriba, debería ser borrado. Sólo queda como ejemplo de lo que no debería hacerse y de lo que, de aquí en más, no será admitido. Las cosas se pueden decir de otra manera.

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